La esperanza nunca muere…
La vida le cambio para siempre a José Guzmán el 5 de noviembre del 2005 cuando su primogénito de 17 años quien trabajaba para concluir sus estudios fue asaltado dentro de un establecimiento de comida rápida y junto a su compañero de trabajo ,también adolecente, perdieron la vida con arma de fuego de alto calibre AK 47.
“Fue un cambio drástico, nunca me imaginé que el dolor me abrazara de esa manera y me di cuenta que de un día para otro existimos y de un día para otro la vida se te esfuma en un ratito…afortunadamente cuando sucedió la tragedia de mi hijo ya llevaba como 10 años trabajando con cristo y me di cuenta que había que aceptar la voluntad de dios y que Dios no se confunde y tiene un plan para cada uno de nosotros…en eso momento no me imaginaba que después de la muerte de mi hijo se formaría un grupo donde yo tuviera que ayudara a familias que estaban pasando por lo mismo que yo pase en ese momento”
Dos años después la detective Isela Brown del programa testigo silencioso encamina a José para crear un grupo de apoyo llamado PADRES Y PARIENTES DE HIJOS ASESINADOS el cual se fundó en el 2007 dando inicio con un grupo de 6 familias quienes recibieron apoyo desde transportación a corte, ayuda con los tramites de funerales, apoyo emocional y hasta terapias y sesiones para ayudarse mutuamente a recuperase de una perdida tan grande como esta.
Al paso de los anos y al darse a conocer la organización, el grupo abrió las puertas también a casos de violencia doméstica, niños abusados y familias que han sufrido actos violentos como robos, secuestro, abuso físico y mental entre otros.
Sin embargo José desde el inicio de la fundación de este programa y hasta hoy en día cubre con todos los gastos de las necesidades de la organización donando hasta sus propios ingresos para mantener entre 8 a 12 horas diarias de servicio voluntario y ayudar a entre 30 a 40 familias por mes.
“Es tan grande la necesidad de las familias que cuando pasan por una tragedia de esta índole están completamente desorientadas y necesitan ayuda.
Desde los tramites del funeral hasta enfrentar el proceso de la corte (si tienen la suerte de encontrar al culpable)…para mí, después de la muerte de mi hijo, he aprendido a cambiar el odio por el amor y de esa manera siento que no quedara olvidado el nombre de mi hijo…es una forma de que el sigua vivo dentro de nosotros…”
Dijo José con gran orgullo.
La desesperación de no poder correr con todos los gastos que la organización genera, llevo a José a buscar ayuda y organizaciones como Magellan, Silent Wittnes y otras. Le han tendido la mano en orientación para volverse organización sin fines de lucro, lo cual después de 5 años se volvió una realidad…
“He tenido que llenar solicitudes y hablar con personas, negocios, medios etc., buscando la ayuda que aún no he recibido…sin embargo las necesidades de las familias siguen creciendo y siguen visitando la organización.
Hablar de la muerte y peor aún en situaciones violentan no es tan fácil y solo alguien que ha pasado por la misma situación puede entender el dolor de otros”
José ha sido criticado y juzgado incluso como loco por familiares y amigos ya que dona su tiempo y dinero en esta causa que sin embargo rindió sus frutos cuando fue invitado en Diciembre del 2012 a una entrevista a Washington para representar a la organización y ser testigo del impacto de las armas de fuego cuando el vice presidente Chaney buscaba testimonios para su plan de regulación en la compra de armas.
Posteriormente José Guzmán fue invitado a la casa blanca para presentar los inicios y los alcances de la organización, dejando una carta/propuesta para exigir la revisión de antecedentes penales a los compradores de armas.
Y es que José Guzmán ha incluso participado en programas de desarme de vecindarios, ha sido la voz de estas familias ante los medios y recibió un reconocimiento por parte del estado de Arizona por su labor humanitaria el 23 de abril del 2013.
Fue reconocido como una de las personas que más labor comunitaria sin lucro ha dado a la comunidad.
El premio se llama “semana nacional del crimen, igualdad para todos” y fue otorgado por el procurador Bill Montgomery dándole reconocimiento por el esfuerzo de los 7 años de trabajo.
“Más que un reconocimiento es un compromiso que me da más fuerza para seguir trabajando con la comunidad ,especialmente con los jóvenes ,para sembrarles la semilla de amor y respeto para que crezcan en un mundo libre de violencia, alcohol y drogas”
José sigue en espera de recursos que pudieran llegar para apoyar esta noble causa y día a día continua su labor con fe y esperanza que la ayuda… viene en camino.
Para información llame a José Guzmán 602-246 -1335 602-463-3932